La nota de la semana pasada referida al proyecto del concejal Leandro Altolaguirre basado en que las computadoras bajo el ámbito municipal de Santa Rosa cambien (migren) desde los programas de Microsoft como el Windows hacia los sistemas Linux, motivó numerosos e-mails. Muchos de ellos fueron de aprobación, pero otros tantos de un tono autoritario utilizando falacias y conceptos extremistas. Se limitan al ataque personal, suspicacias, o a datos anecdóticos más proclives a la polémica futbolera que al pensamiento racional.
Sacando de lado comentarios y ataques que no merecen análisis, los principales argumentos de estos e-mails son: "el Linux es más seguro, es gratis, y se puede conocer su código fuente. Hay muuuchos ejemplos de eso". Bien, insisto:
1) La seguridad es relativa, depende de la administración. Decir que un sistema Linux será siempre más seguro que otro sin tener en cuenta ningún factor adicional denota un fanatismo insano.
2) Que Linux sea gratis es también relativo porque hay que pagar por soporte y capacitación (que generalmente es más costosa que Windows, especialmente en un medio como la ciudad de Santa Rosa) en particular en casos donde hay otros sistemas implementados desde hace años.
3) Acepto que tener disponibles los códigos fuente de todos los sistemas (operativo, aplicaciones, etc.) como supuestamente permite Linux, puede ser importante para verificar "qué" hacen estos programas, incluso para aportar modificaciones o descubrir vulnerabilidades. Pero seamos realistas: existen muy pocas personas con la capacidad para poder leer, comprender y rescribir este código de manera eficiente (incluso dentro la comunidad Linux y quienes brindan soporte del mismo) como para que sea productivo hacerlo. Generalmente en pocos entornos de sistemas -en el interior en particular- existen personas que aseguran esta condición de "coders". Por lo tanto, esta supuesta ventaja, tiene una relevancia muy limitada y negarlo también es propio del fanatismo. Asimismo, pongamos fin a las acusaciones paranoicas: si alguien tiene la certeza de que Microsoft está realizando "oscuras operaciones" a través de sus sistemas, entonces que haga las denuncias correspondientes y que exponga las evidencias.
4) Los datos anecdóticos (como: "ojo, que Linux se implementó en Munich, Brasil, Extremadura" -sic-) pueden servir para la charla en el bar, pero no para sustentar la necesidad de un proyecto de orden Estatal en Santa Rosa, La Pampa, que debe ser probado con documentación, estadísticas, consultorías y evidencias inequívocas. Si una migración a Linux supone ventajas a largo plazo hay que dar cuentas claras de las mismas a los contribuyentes, los valores exactos de su ejecución, la determinación del plazo requerido para comenzar a gozar estas ventajas, el análisis de costo/beneficio, si los empleados municipales aceptarán y se sentirán a gusto con nuevos sistemas, etc... y así poder tomar decisiones en contexto local con información racional (ese es el principal reclamo de mi artículo originalmente que muchos no comprendieron y tomaron como "blasfemia hacia GNU/Linux"). Pero nunca hacerlo a causa de argumentos falaces, "porque miles lo hicieron", consejos, moda, cuestiones ideológicas, propaganda política, o una "movida" apasionada. Asimismo argumentos como "el Estado debe garantizar en todo momento Seguridad, Accesibilidad y Transparencia a sus ciudadanos... no existe sistema en el mundo a excepción del "Software Libre" que pueda garantizar todas estas cuestiones." son genuinamente optimistas pero a la vez pueriles y difíciles de comprobar.
La trampa del fanatismo
La desinformación conspiranoica está presente en todos lados. Algunos señalan con indignación los "dólares que se van para Microsoft", pero no les preocupa los millones que se van para otras extranjeras (incluso relacionadas al "software libre"). Además parecen desconocer cuántos puestos de trabajo e ingresos genuinos se generan desde la salida de un producto de software en el extranjero hasta que llega a las manos del usuario final en el interior de cualquier país y cuál es el verdadero porcentaje de regalías que gana el "millonario malvado" por cada licencia.
Finalmente, la utilización de Windows o Linux depende del contexto, donde cada uno podrá adaptarse mejor, pero nunca de aseveraciones extremistas y fanáticas. Hay casos en los que Windows es una mala opción y otros en los que Linux no es recomendable. Y eso, amigos de Linux, es algo que sería sano comenzar a aceptar por más que les duela en la camiseta...
En todo esto, la actitud más lamentable es la del cyberconcejal Altolaguirre que guardó silencio y se remitió a redistribuir por e-mail apresurados comentarios ajenos (con teléfonos y datos comerciales de un consultor privado foráneo) en lugar de dar cuenta él mismo sobre los cuestionamientos a su propio proyecto.
Gabriel Alcalde Yánes
Titular de Estudio DIGISAPIENS®
Desarrollo de aplicaciones y Distribuidor Autorizado de Software Macromedia/Adobe®
Ex distribuidor de SUSE Linux®
E-mail
Twitter: @gabrielsapiens |