Un equipo periodístico de Semanario REGION® una vez más recorrió la ruta binacional del paso El Pehuenche -como lo viene haciendo desde hace 20 años-, fue el pasado mes de enero de 2015.
Del lado chileno, desde fines de 2012 la pavimentación está completa y terminada.
Del lado argentino, mientras los medios siguen copiando y pegando partes de prensa dibujados, nosotros estuvimos allí y aún siguen de tierra 35 kms y otros 22 kms pudimos comprobar que estaban en obras de pavimentación en la fecha señalada de nuestro recorrido. El ritmo de las tareas no obstante, siguen lentas y si acaso la represa “Portezuelo del Viento” se llegara a construir -según se anunció, con financiación de China-, todo se atrasaría más, ya que la obra prevé dejar bajo el agua el paraje Las Loicas y parte de la actual ruta.

De Talca a Malargüe
El cruce cordillerano lo hicimos desde Talca (VII Región de Chile) hacia Malargüe (Mendoza, Argentina). El tramo del lado chileno -RN Nº 115-, impecable.
Al llegar al límite del Hito Pehuenche, la ruta se corta abruptamente y comienza el ripio, es el lado argentino que aún está sin terminar y avanza lentamente.
Desde el límite -ingresando a la Ruta Nacional Argentina Nº 145-, medimos odómetro de por medio, 57 kms no finalizados. Son 35 km aún de ripio y 22 kms en obras, que se alternan de acuerdo a la complejidad de las tareas.
Más adelante, entre la zona de Portezuelo del Viento y la RN 40, están los últimos 19 kms pavimentados que se inauguraron en 2005 y que no continuaron ante la posibilidad de que el área pudiera quedar bajo el agua (ver “La represa...”), tema que hoy vuelve a arrojar sombras en la zona.

¿Y la Aduana integrada ?
La obra de la aduana binacional integrada en el límite, todavía es un proyecto no concretado y las autoridades consultadas no arriesgan una fecha de realización.
Mientras tanto, Chile desactivó para al púbico el viejo destacamento de control “La Mina” y construyó el “Complejo Fronterizo Pehuenche”, un edificio nuevo de 2.000 m2 en Laguna del Maule, donde tiene aduana y migraciones, muy moderno y adecuadamente equipado con oficinas de control sanitario, material turístico, escaners y cintas para revisión de equipajes, aire acondicionado en todo el ambiente y baños limpios. Lo destacable de la inversión es que ese edificio es “provisorio”.
En contraposición, por el lado argentino sigue en funciones el viejo puesto del paraje Las Loicas, donde Gendarmería Nacional alberga el control de migraciones y Afip hace lo propio con aduana.
Las instalaciones pertenecen a un antiguo campamento de la Dirección Provincial de Vialidad de Mendoza que desde hace medio siglo mantiene la misma fisonomía y detalles edilicios, donde el personal trabaja en precarias condiciones, con mínimo equipamiento -casi ninguno aparte de viejas computadoras- y por supuesto, de lo mismo sufren los viajeros que pasan por allí.

La Represa del Río Grande “Portezuelo del Viento”
Lo que queda pendiente de la pavimentación del lado argentino, es el tramo que va desde la zona geográfica conocida como Portezuelo del Viento hasta casi el acceso a Cajón Grande.
Un tramo que si bien ya está trazado, es muy posible que haya que modificarlo en virtud de otra obra proyectada en el área que recobró vigencia en estos días: la Represa del Río Grande, obra conocida simplemente como “Portezuelo del Viento” en referencia al paraje homónimo.
De concretarse esta obra, aseguran que dejaría parte de la traza actual y el mismo paraje Las Loicas bajo el agua. Por lo tanto, tras la mención informativa que se conoció luego de la visita de la presidente argentina a China habría que preguntarse: ¿atrasa o adelanta este Corredor Bioceánico?. El tiempo lo dirá.

Un pueblo bajo el agua
“Una mezcla de esperanza e incertidumbre, difícil de definir, es la sensación que tienen los habitantes del paraje mendocino Las Loicas, en la ruta del Corredor Bioceánico.” reseña el sitio Ser y Hacer de Malargüe y agrega:
“La esperanza se debe a que anhelan que tras la apertura del Paso El Pehuenche en forma permanente, pueda haber mayores posibilidades de ingresos económicos debido a un incremento de los servicios que actualmente se prestan y a otros que se demanden. Mientras que la incertidumbre se apodera de ellos cuando se habla de que el centro urbano y varios puestos cercanos desaparecerían al construirse la represa hidroenergética de Portezuelo del Viento, cuyo espejo de agua los sepultaría”.

Las Loicas en la actualidad
El paraje debe su nombre a un ave originaria de Chile y Argentina conocida como loica, lloica o milico (Sturnella loyca), ave passeriforme (que tiene forma de gorrión). Se identifica por una gran mancha roja en su pecho.
Las Loicas está conformada por una frondosa arboleda, recostada sobre la margen sur del río Chico. Actualmente viven unas 250 personas. Cuenta con un centro de salud, la escuela primaria Bernardo Houssey que alberga a cerca de 40 niños, un campamento de la Dirección Provincial de Vialidad en cuyo edificio además se establecen los organismos de controles migratorios, fitozoosanitarios y aduaneros, mientras está abierto el Paso El Pehuenche. En la faz comercial hay un comedor, almacenes, cabañas, departamentos de alquiler y un camping propiedad de la Cámara de Comercio de Malargüe.
El lugar es muy visitado por el turismo por su proximidad con el Paso El Pehuenche, termas de Cajón Grande y porque en medio del pueblo nace la ruta provincial 226 que conduce, costeando la vera oeste del río Grande, a Valle Noble, las termas de El Azufre y al otro paso internacional del Sistema Pehuenche, denominado “Planchón-Vergara” que ingresa a Chile por Curicó.