En las pasadas vacaciones de verano (diciembre2004 -febrero 2005) la costa atlántica vistió sus mejores galas, primero porque un mayor numero de turistas argentinos pudo disfrutar de un merecido descanso luego de tres años con una gran inestabilidad económica y segundo porque muchos de los que antes se iban «afuera» por el cambio «uno a uno», ahora veranearon en su país. No obstante, el viajero experimentado puede notar que hay un gran atraso en el segmento de ofrecer calidad en servicios turísticos en los hoteles, por falta de capacitación, por no haber productos diferenciados que de un valor agregado a los pasajeros. En este sentido, es digno de destacar las diferencias, como por ejemplo el paso adelante que dio la cadena hotelera argentina «San Remo Hoteles», con establecimientos en Mar del Plata (foto), Villa Gesell, San Bernardo, Santa Teresita, San Clemente del Tuyu y recientemente en Buenos Aires...

Sorpresa a los pasajeros
«San Remo» sorprendió gratamente a sus pasajeros esta última temporada con la incorporación de un nuevo servicio: La animación turística en todos sus hoteles, organizado y dirigido por profesionales en el área como Maria Krupka, Fernando Medina, Abel Diosquez, José Maria Vázquez, Eduardo Díaz, Andrés Campero y Pedro Pablo Abreu.
Una vez mas quedó demostrado por los excelentes comentarios de los veraneantes, que sin lugar a dudas la animación es un servicio imprescindible dentro de la hoteleria, porque a través del animador es posible fidelizar a los clientes, dándoles siempre un valor agregado a sus horas libres,
Lamentablemente, no todos los empresarios aun se han dado cuenta de esto, no han descubierto todavía que el animador es, como bien lo definió el especialista en el tema Pablo Abreu, «el arquitecto de la felicidad», quien es capaz de crear y cohesionar grupos para que pasen unas vacaciones divertidas.

No es de extrañar que hubo familias que en toda la semana de vacaciones en la cadena San Remo, a partir del servicio de animación turística, solo fueron un día a la playa, ya que prefirieron quedarse en el establecimiento disfrutando de las actividades de animación en la pileta y el resto del hotel. El eco de la experienca fue noticia para los medios locales. En la foto una escena de la entrevista televisiva de un canal de la costa.

El cliente promueve
Precisamente con el profesor Abreu dialogamos sobre esta experiencia y el afirma: «Los animadores son profesionales que innovan, desarrollan nuevas ideas y propuestas, inspiran a las personas que tiene a su alrededor para que participen en el programa de actividades. El animador debe ser abierto, intuitivo, accesible y condescendiente, ya que el auténtico protagonista es el destinatario de las propuestas de animación, el turista, el cliente».
«La animación turística ofrece la posibilidad de que los pasajeros puedan ocupar su tiempo con actividades gratificantes y emocionantes -expresa Abreu-, permitiéndoles conocer, evaluar y vivir el destino en sus recursos más característicos y diferenciadores, dentro de una experiencia respetuosa con el entorno socio cultural y ambiental. Si la oferta de actividades es adecuada para todos, con seguridad responderá a las expectativas y exigencias de los clientes, con lo que se reducirá la necesidad de salir del establecimiento para satisfacerlas. Luego estos pasajeros se convertirán en promotores, agentes de marketing y publicistas del establecimiento, ya que seguro su buena experiencia será comentada a las personas cercanas una vez de vuelta en su contexto social y laboral».

Pedro Pablo Abreu Hernández es Profesor de Recreación y Animación en Cuba, Brasil, Ecuador y Argentina. Profesor, Asesor y Consultor de Redes hoteleras internacionales (Sol Meliá, Accor, entre otras). E-mail: [email protected] Autor del Manual de Animación Turística en español: «La Animación es algo más que...» editado por REGION® Empresa Periodística, con más de 140 juegos explicados. Adquirir aquí>>

La experiencia de «San Remo»
Dentro de las actividades que se realizaron diariamente en la cadena de hoteles «San Remo» de la costa atlántica, hubo caminatas, hidrogimnasia, clases de yoga, cabalgatas, campeonatos de ping pong, pool, metegol, hasta fiestas a la noche. Con actividades planificadas para niños, jóvenes, adultos, 3ra edad y personas con atenciones especiales.
«Cualquier actividad que deseemos catalogar en un establecimiento turístico, como actividad de animación turística, en primer lugar no podemos olvidar que la misma ha de resultar divertida para todos los involucrados -explica Abreu-. Los niños, esos bajitos que en muchos hoteles no saben qué hacer con ellos, en los hoteles de la cadena «San Remo» tuvieron sus torneos, clases de manualidades, etc.»
No es de extrañar que hubo familias que en toda la semana de vacaciones solo fueron un día a la playa, ya que prefirieron quedarse en el establecimiento disfrutando de las actividades de animación en la pileta y el resto del hotel.
La experiencia de los pasajeros fue tan novedosa y gratificante, que muchos decidieron regresar en ese mismo mes a los hoteles de la cadena.
«Un cliente satisfecho llega a convertirse en un cliente fijo y repetirá su estancia en el hotel año tras año. Si los niños han quedado contentos con la animación del hotel, intentaran convencer a sus padres de que vuelvan al año siguiente, y muy pocas veces los padres niegan darle el gusto a sus hijos. Todo esto se traduce en fidelización del cliente aportando una rentabilidad positiva para el hotel que vera incrementada su producción» finalizó diciendo el profesor Abreu, que lanzó una invitación para comprobar la experiencia, invitando a los lectores a que visiten los establecimientos de la cadena San Remo Hoteles en las próximas vacaciones de verano.
Ver: www.sanremohoteles.com