Ahora, cuando el mundo se encuentra cada vez más explorado, los turistas comienzan a poseer menos destinos nuevos a descubrir, porque el viajar a lugares lejanos ya no es considerado algo exótico en un planeta donde los negocios se globalizan, el medio ambiente es contaminado y gran parte de la población mundial se encuentra afectada por las llamadas enfermedades de la civilización, como el stress (por mencionar un ejemplo).
Corresponde entonces a los hoteleros, ofrecer un servicio que además de proporcionar bienestar, permita a los huéspedes mantener un óptimo estado de salud. ¿Creen que seria algo lógico pensar en la animación y recreación como una opción inteligente para satisfacer las necesidades de conocimiento y movimiento que poseen los clientes?

La animación debe ser vista como algo participativo, informativo, interesante, único y excitante, que facilita el intercambio y aumenta el relacionarse entre todas las personas que se encuentran en un hotel, surgiendo así nuevas amistades, incrementando el conocimiento de las personas sobre los elementos culturales, costumbres y tradiciones del lugar visitado. Los animadores contribuyen grandemente a que esto suceda, por tanto la animación tiene funciones sociales y culturales bien definidas: la social se puede diferenciar en el esfuerzo por relacionar a todas las personas de un hotel mediante diferentes actividades y la cultural esta en el esfuerzo que realizan los animadores por dar a conocer su entorno, el patrimonio de su región o país.

Animación organizada
Es mediante la utilización de una animación organizada y estructurada, considerando todas las características de los clientes a hospedarse en nuestro hotel, que lograremos proporcionarles bienestar y alegría, mejorándoles de forma grata su calidad de vida durante el periodo vacacional, para ello resulta necesario facilitarles la práctica de variadas actividades en su tiempo libre, sin olvidarnos de planificar para la noche acciones donde el cliente se sienta a gusto y pueda descansar de todo lo realizado durante el día.
Con el correr de los años resulta cada día mayor la cantidad de personas que conociendo la existencia de hoteles con animación y recreación deciden pasar sus vacaciones en estos lugares donde la ejercitación, alimentación balanceada y el divertimento poseen gran prioridad.
Recordemos, para que un turista elija un determinado destino debe existir algo que atraiga animadamente su atención, esto puede ser: la cultura, música, clima, playas, etc, de un determinado lugar. Podemos citar ejemplos de turistas que viajan a Hawai solo para surfear en sus peligrosas olas, otros tienen como destino la Antártida, el Himalaya o deciden vacacionar en un determinado lugar por el sólo hecho de bucear en su mar, lanzarse en paracaídas, ver las ballenas, visitar un glaciar, etc., sin olvidar que ya el adelanto es tan grande, que existe el millonario turismo espacial.

Decisión por hoteles
Muchos deciden un determinado destino sólo por los hoteles que realizan actividades de animación. Pongamos el caso de Club Mediterráneo (Club MED), son tantas y variadas las actividades de animación y recreación que ofrecen, permitiendo que el cliente aprenda a escalar paredes, tirar con arco y flecha, balancearse en un trapecio etc., de manera que el tiempo libre del huésped es aprovechado y éste se siente feliz y contento, siempre deseoso de regresar a esa clase de hotel.
Investigaciones realizadas en los Estados Unidos por la T.I.A (Asociación de Industria Turística) en 1999, revelan que el 27% de los turistas asociados a ese sector gastaron dentro del país entre 570 y 2.560 dólares diariamente, lo más sorprendente es que estos datos solo se refieren a hoteles con animación donde según las conclusiones de esta asociación, las tasas de ocupación resultaban mayores que en hoteles sin este servicio.
Muchos hoteleros no ofrecen este servicio porque plantean que su hotel recibe clientes de paso los cuales se alojan por un período de tiempo relativamente corto, una noche o dos noches, para después seguir camino hacia otro destino, por lo cual no necesitan de animación. Lamentablemente este criterio es errado y muy lejano de buscar lucros en el servicio hotelero. La animación debe ofrecerse tanto para quien esta una hora en nuestro hotel como para quien nos acompaña por toda una semana, si miramos a nuestro alrededor verán que mucho de estos hoteles llamados de paso, poseen una infraestructura envidiable en cuanto a recreación y animación, es decir tienen piscina, canchas de fútbol, tenis, voleibol, mesas de billar, cartas damas, etc, pero al no poseer los conocimientos necesarios sobre este importante servicio, ni al personal capacitado, no ofrecen el mismo, por eso cuando llega un hotel internacional a la región trae para sí todos los huéspedes con un sólo servicio que hace la diferencia de los demás: animación para todos los huéspedes.

El turista del futuro
En un articulo publicado en la revista Technology and Competitive Strategies por Auliana Poon, donde aborda las tendencias del turismo en el nuevo milenio plantea: «el turista del futuro será cada vez más independiente, conciente de la calidad de los servicios, experimentado y difícil de complacer, poseerá una gran sed de aventura y deseara cada día realizar algo nuevo» corresponde entonces a la animación enfrentar este desafío complaciendo al turista.

Favorecer la salud
Coloquemos un pequeño ejemplo del bienestar que produce la animación para la salud, todos conocemos que la disminución progresiva de los esfuerzos físicos, como resultado del desarrollo tecnológico, ha creado una actitud negativa de muchas personas hacia la actividad física, sumiendo al hombre en un sedentarismo que afecta su salud.
En un hotel, un cuerpo que se encuentra descansado quiere seguir descansando, pero en la medida que los animadores sean capaces de mostrarle a los huéspedes las variadas tareas que pueden realizar como: jugar voleibol, realizar gimnasia localizada, hidrogimnasia, danzar, etc., creará en ellos la conciencia de la necesidad del movimiento y verán las actividades como un elemento fundamental y agradable para enfrentar el sedentarismo, manteniendo sus funciones biológicas y psíquicas en un óptimo estado durante sus vacaciones
Es universalmente conocido que el ejercicio físico sistemático promueve la salud, bastaría poseer en el hotel un programa de caminatas, caminar es una actividad física natural, simple de ejecutar, no requiere de equipamientos especiales para su práctica y puede ser desarrollada por personas de todas las edades. Esta es una opción que pueden brindar los hoteles sin animación, no incluye costo alguno, solo tendrían que realizar un mapa del lugar, para que los huéspedes puedan realizar esta actividad, dándole recomendaciones para que sea realizada en forma exitosa.

Trabajo en equipo
La animación no puede ser vista como algo aislado que sólo corresponde a un departamento del hotel. En sí todo el hotel trabaja como un equipo ofreciendo este servicio, aunque a veces lo desconocen. Por ejemplo al decorar agradablemente el local de buffet y los diferentes platos que serán ofrecidos, estan realizando este servicio.
Cuando los mozos realizan a las servilletas variadas figuras, cuando las camareras al colocar las toallas sobre la cama arman la representación de un barco, una flor etc., eso también es animación, o más simple aun, en el gesto de una recepcionista dándonos la bienvenida al hotel, ofreciendo una agradable sonrisa, allí también existe animación.

Colaboración exclusiva para REGION® desde Brasil: Prof. MsC: Pedro Pablo Abreu Hernández - Profesor de la Universidad de Caxias do Sul, Brasil
Especialista en recreación y animación hotelera, Profesor Consultor para redes hoteleras internacionales.

A los empresarios hoteleros
Muchos empresarios hoteleros piensan que este servicio significa sólo trabajar con niños o tener a una determinada persona a las noches tocando un piano en el hotel. Existen quienes llevan muchos años trabajando en hotelería, pero viven en la época de los dinosaurios con respecto a los progresos que cada día se dan en el mundo turístico, les cuesta trabajo adaptarse a las transformaciones y esto trae como consecuencia la inevitable perdida de clientela.
Por ello quien no comprenda que el mundo turístico es un tren que avanza muy rápido y no se suban a él, quedarán en la estación observando como se alejan sus aspiraciones.
Los efectos de la demora en la toma de una buena decisión son desvastadores, por eso podemos concluir diciendo que la animación es algo que aporta salud a los huéspedes, tiene función de marketing por que un cliente comunica a sus amigos las características del hotel para que lo visiten, tiene función social y cultural, además permite que el hotel aumente sus ventas y obtenga grandes ganancias con la aplicación de este servicio diferenciado.
Recuerden que a todos los viajeros les atraen las novedades, por eso debemos ser siempre personas innovadoras en nuestro sector.
Para comprender todo lo antes expuesto, los invito a que experimenten la diferencia estando en un hotel con animación y otro que no posea este servicio, simplemente compare lo vivido en cada hotel.

Pedro Pablo Abreu Hernández